Se ha encontrado que Experiencias Adversas en la Infancia están asociadas a problemas de salud mental en la vida adulta, sin embargo, se ha estudiado o bien a las Experiencias Adversas en la Infancia en conjunto, o algún tipo de Experiencia Adversa de Abuso en la Infancia en particular, pocas veces se ha hecho un estudio que aborde los tres tipos de abuso, el Abuso Psicológico, el Abuso Físico y el Abuso Sexual. El objetivo de esta investigación fue explorar la presencia de Experiencias Adversas de Abuso en la Infancia y su relación con Sintomatología Internalizante de Ansiedad y Depresión en jóvenes universitarias/os. Es un estudio de tipo cuantitativo y transversal, compuesto por una muestra de 374 jóvenes universitarias/os de la Licenciatura en Psicología, de la Facultad de Psicología y Educación, de la Universidad Autónoma de Querétaro, de una edad comprendida entre los 18 a los 27 años. Se encontró que el 85% de los/las jóvenes universitarias han experimentado al menos una Experiencia Adversa de Abuso en la infancia. El 100% presentó Sintomatología de Ansiedad y Depresión, y el 39% obtuvo una puntuación limítrofe o clínica. Además, los datos mostraron que la Frecuencia de Experiencias Adversas de Abuso en la Infancia se encuentra relacionada a la presencia de Sintomatología Internalizante de Ansiedad y Depresión en la vida adulta. También se encontró que el género es un factor que interviene en la probabilidad de experimentar Abuso Sexual Infantil. Estos resultados hacen evidente la necesidad de políticas públicas en salud mental que consideren la prevención y la intervención en edades tempranas, así como en la vida adulta.