Descripción:
Alphaville, Brave New World y Nosotros son las tres distopías que se utilizan para limitar y comprender una crítica a Occidente. El problema lo constituye el exceso de racionalismo, la adoración de la tecnología, el individualismo y el ateísmo. De esto se deriva la pérdida de la familia, del amor, de la conciencia, de los sentimientos y del arte. Se plantea la hipótesis de que el arte a través de la distopía ha planteado el problema y el arte a través de la utopía puede plantear la solución. El objetivo es proponer una sociedad en la que sean valiosas las tribus, o los grupos, en que los pueblos cultiven su propio alimento, en la que se propicie la salud con la gimnasia y el canto y en la que sea importante la adoración de Dios. El método constituyó en hacer un análisis histórico apoyándose en Marx, Nietzsche, Toynbee, Eliade y el islam para elucidar como Occidente llegó a ese punto. El análisis histórico pasa por lo económico, la acumulación originaria, sobre todo la pérdida de la posesión de la tierra; lo político- social, la disolución de las tribus y de su poder; lo cultural, el predominio de la razón, la adoración de la tecnología y la pérdida de la adoración de Dios. La solución se vislumbra en las utopías tanto occidentales como musulmanas. Las occidentales son las de Moro y Campanella, y las musulmanas las de Averroes, Al Farabi e Ibn Tufail. Se concluye que las distopías sí han planteado el problema, aunque no se enfoquen en las tierras o en el alimento. Las utopías plantean la solución que se puede difundir a través del arte. También se ha logrado demostrar que los conceptos de rito, mito y símbolo, planteados por Eliade, son útiles para explicar el arte, especialmente el cine y el teatro y también como estos dos tipos de arte se pueden utilizar para la educación de los pueblos en el sentido que plantea la utopía que se propone.