Los contenidos matemáticos son de gran importancia en la educación primaria; sin embargo, el logro educativo no es favorable en México. Según los resultados de Planea (INEE, 2018), casi un 80% de estudiantes que están en su último grado de primaria no alcanzan un dominio satisfactorio de los contenidos matemáticos. Al respecto, diversos estudios dan cuenta del papel primordial que tienen las prácticas de enseñanza de las y los docentes en las oportunidades de aprendizaje de sus estudiantes (Artigue, 2004, Ávila, 2016). Por otro lado, el desempeño en matemáticas de estudiantes mujeres va disminuyendo mientras avanzan en su nivel de estudios y es poca su presencia en carreras relacionadas con esa área. Según Ursini y Ramírez (2017), desde los primeros niveles de educación básica el profesorado fomenta la formación de ciertas creencias, actitudes y la reproducción de estereotipos de género que alejan a las niñas de las matemáticas y las ciencias. Teniendo en cuenta lo anterior, en este trabajo se observaron clases del nivel primaria para analizar prácticas de enseñanza de las matemáticas y si eran equitativas respecto al género de los y las estudiantes. Para ello, se usaron dos instrumentos de observación, uno de ellos diseñado específicamente para los fines de esta investigación. Los resultados muestran que algunas prácticas de enseñanza de las matemáticas están más consolidadas y son consistentes, y otras son más variables. Además, en general, no se encontró una tendencia en las prácticas de enseñanza que favorezca a niños o a niñas, sin embargo, se observa un sesgo referente al uso de lenguaje no incluyente por parte de los y las docentes.