Descripción:
El presente estudio tiene el propósito de indagar los criterios de los niños para representar gráficamente y de manera espontánea, una serie de ritmos sencillos. Con este fin, se solicitó a 20 niños de 7, 8, 11 y 12 años de edad, sin previo contacto con la notación musical convencional, que trataran de escribir ritmos que el adulto ejecutaba y el niño imitaba previamente. Los trabajos de J. Bamberger (1988), a propósito de la representación gráfica de los ritmos, han puesto de manifiesto que aproximadamente a los once años ocurre un cambio importante en la lógica de las representaciones gráficas que los niños realizan de los mismos. Con el presente trabajo se ha pretendido corroborar estos datos así como dar cuenta de la progresión en las representaciones gráficas de los niños, comparando las producciones de niños de esa edad con la de niños más pequeños. Todo esto, con el objeto de poder comprender mejor los procesos psicológicos que desarrollan. La indagación se ha llevado a cabo a través de la realización de entrevistas individuales basadas en el método clínico piagetiano. Los resultados obtenidos han mostrado una correlación entre los datos encontrados por Bamberger (1988, 1991) y los aspectos atendidos por los niños que han participado en este estudio. Asimismo, se ha encontrado una progresión importante en la lógica infantil en lo referente a la representación gráfica de los ritmos. Se propone la continuación de estudios de la misma naturaleza del presente trabajo, a fin de vincular la Educación musical y la Psicología; así como de actualizar el conocimiento que en ambas disciplinas se tiene sobre el pensamiento infantil, en cuyo desarrollo y construcción coinciden tener una gran responsabilidad.