Descripción:
La singularidad de cada ser humano es inefable, por lo tanto, no hay clasificación, ni parámetro que la contenga y defina, tampoco puede ser nombrada de maneras que apunten a la discriminación. Reconocer la alteridad significa apreciar la singularidad y en ese sentido la differánce. La presente investigación muestra la posibilidad de encuentro con el otro a partir de la ternura que provoca la excepcionalidad descubierta en cada ser. Ser excepcional es ser de otra forma que ser. Particularmente mencionaremos a los jóvenes excepcionales del centro de apoyo y calidad de vida CALI. AC. para narrar sus experiencias de creación poética, de apropiación de sus voces y re-significación de sus cuerpos, como auténticos protagonistas de obras inauditas. Contamos lo acontecido en la obra educativa: taller de expresión corporal, creación literaria, performance y en la edición del florilegio excepcional.