La satisfacción sexual en la edad madura históricamente ha sido un tema poco explorado a pesar de sus repercusiones en la salud y en la calidad de vida y donde la cultura y el contexto social son fundamentales. Se partió del supuesto de que sí bien, en las mujeres y los hombres maduros su sistema erótico y sexual continúa bien equipado, actualmente todavía prevalecen en ambos géneros, creencias, mitos y prejuicios que limitan, reprimen y niegan el derecho al placer y a la búsqueda de satisfactores sexuales acordes a los cambios corporales, psicológicos y sociales existentes, por lo que el objetivo de este trabajo de tesis es el de identificar y analizar las creencias, actitudes, y prácticas reales en torno a la satisfacción sexual de mujeres y hombres de 40 a 60 años, desde la Antropología Simbólica e Interpretativa de Geertz y el Materialismo Cultural de Harris. En ambos géneros, se utilizaron como herramientas la entrevista semi dirigida, cuestionarios autoaplicables y un diario de campo; encontrando como datos relevantes que esta etapa de la vida suele ser vivida como una cadena de pérdidas en la imagen corporal, el vigor físico y la salud, con repercusiones importantes en el comportamiento erótico y sexual así como en la calidad de vida de mujeres y hombres de más de 40 años de edad, y donde la cultura androcéntrica, a través del proceso de endoculturación, las creencias religiosas y las alternativas sociales de satisfacción sexual, limitan e incluso niegan el placer erótico sexual en las mujeres maduras, siendo permisiva para el género masculino.