El agua es un elemento indispensable para la vida, pero no solo importa su disponibilidad, sino también su calidad. El agua para consumo humano debe estar libre de microorganismos patógenos y tener bajas concentraciones de sustancias químicas ó de otra índole, que puedan presentar un riesgo para la salud humana. La Organización Mundial de la Salud(0MS), estima, que uno de cada cuatro individuos hospitalizados en el mundo, ocupa una cama debido a alteraciones de la salud, ocasionadas por la insalubridad de este elemento. La importancia sanitaria del agua, es directamente proporcional a la potencialidad que tiene de convertirse en un factor negativo para la salud, al provocar enfermedad. Los informes elaborados por la OMS, indican que el 80% de las enfermedades que se producen en los países del tercer mundo en desarrollo como México, en su mayoría son causadas por la contaminación