Descripción:
Los gérmenes anaerobios fueron descubiertos por Pasteur, quien estudió profusamente las bacterias esporuladas. Casi de forma paralela y a partir de 1893, Veillon y Zuber señalaron la presencia de especies anaerobias no esporuladas, o ambos, y a
los que se consideró responsables del olor fétido de las secreciones aparecían en estos casos.
En 1898 pudieron observar su poder patogénico, el cual se fue acrecentando hasta el comienzo de la era antibiótica, en que, de forma espectacular, aunque aparente eliminan
prácticamente su poder