Descripción:
Se explica la teoría del graffiti, estableciendo los objetivos que impulsan a algunas personas que deciden hacer de la escritura en los espacios públicos o privados tales como paredes de edificios y casas, vehículos, trenes, su forma de expresión. Una práctica generalizada en las colonias de la periferia de la ciudad o en edificios del mismo Centro Histórico que son maltratados con estas llamadas pintas y que indudablemente se traduce en conductas antisociales o actos vandálicos, ya que no se respetan los bienes provocando un daño al patrimonio de particulares o de la administración pública, resultando necesario establecer normas para erradicarlos. En este sentido, se propone reformar la legislación aplicable, nacida justamente de la petición ciudadana, esta mala costumbre genera inseguridad en distintas zonas de la ciudad en especial, por los grupos de jóvenes que se concentran para efectuar estas pintas. Ya que en la actualidad se considera delito perseguible de oficio, cuando el daño es en bienes de valor científico, cultural, edificios públicos, monumentos, equipamiento urbano o bienes de utilidad pública, en tanto que, en los demás casos, daños a bienes de los particulares, se requiere de la denuncia del afectado, ocasionando que generalmente no se sancione. La propuesta en el presente trabajo de investigación, se enfoca a combatir el problema del graffiti, buscando la forma de bajar la incidencia del graffiti que provoca esa inconformidad e inseguridad en la sociedad, llegando a la conclusión de que esta actividad se persiga de oficio haya o no denuncia del afectado, sin que con ello se tenga la intención de internar a los jóvenes a la cárcel, sino sancionándolos con los medios alternativos de solución de conflictos como el trabajo comunitario.