Los objetivos del Museo de Arte Moderno, en lo referente al Diseño Moderno van más allá de los rasgos estilísticos estereotipados comúnmente atribuidos a la modernidad. El diseño industrial ha desarrollado una estética que ha logrado tener una fuerte influencia a nivel internacional. La belleza innovadora y reduccionista de los objetos, ejemplifica la perfección que la maquina ofrece como una herramienta moldeadora. Desde el principio, el diseño moderno bajo las predicciones de la máquina, era vista como el portador de valores, de objetividad y la promesa de un profundo cambio social. En esta investigación se ha realizado un recorrido histórico de cómo el MoMa ha jugado un papel importante, desde el momento de su fundación. Durante muchas décadas, el MoMa ha tratado de extraer esta idea atemporal de belleza, que al mismo tiempo ha revisando y perfeccionando el paradigma inicial. Ha realizado una extensa búsqueda, dentro de objetos de la vida cotidiana que sean baratos y que se muestren piezas únicas, en catálogos, tiendas y en colecciones privadas. Todo se resume en la importante contribución del curador en diseño contemporáneo, la cual no se basa en la recuperación de pruebas existentes de una regla preestablecida, sino en un proceso específico de nuevos conceptos en una evolución continua. Los curadores en afinidad con la misión del MoMa, han sido reconocidos por su poder como conocedores, asumiendo la oportunidad de influenciar el cómo visualiza y vive la sociedad