Mostrar el registro sencillo del ítem
dc.rights.license | http://creativecommons.org/licenses/by-nd/4.0 | es_ES |
dc.creator | Cecilia Dionicio Rangel | es_ES |
dc.date | 2010-06 | |
dc.date.accessioned | 2016-09-27T19:57:49Z | |
dc.date.available | 2016-09-27T19:57:49Z | |
dc.date.issued | 2010-06 | |
dc.identifier | 796 - RI001368.pdf | es_ES |
dc.identifier.uri | https://ri-ng.uaq.mx/handle/123456789/6821 | |
dc.description | Para Tapia, (2002) el consumo de drogas siempre ha existido en la historia de la humanidad. El hombre ha hecho uso de las plantas y productos químicos para diversos fines: mágico religiosos, para evadir la realidad, para hacer frente a los problemas o por la incapacidad para ello, por simple placer, o con fines médicos. Es así como las drogas han existido desde tiempos más antiguos, pero la forma de uso ha cambiado, así como el número de personas que transitan del simple consumo ocasional a la adicción. Por su parte Villaroel (2002) señala que el problema de las adicciones es universal y se considera un fenómeno multicausal que tiene repercusión en el individuo, en la familia y comunidad. El consumo de drogas, legales (alcohol y tabaco), se ha convertido hoy en día en uno de los principales problemas de salud pública en el estado así como en el país, siendo el consumo de estas drogas, factores de riesgo para la principales enfermedades crónico degenerativas que se encuentran dentro de las principales de mortalidad, afectando a la población en general (SSA, 2008). Con respecto al consumo de alcohol, este es causa de 1.8 de millones de muertes del mundo (Informe Mundial de Salud, 2002). En el año 2000, el alcohol fue el factor de riesgo más importante para la salud tanto en América del Norte y por igual del sur, en los países medios y bajos, incluyendo Brasil, México y la mayoría de los países latinoamericanos (Rehm y Monteiro, 2005). En cuanto al consumo de tabaco la ENA (2002), reporto que 25.56 % de las mujeres alguna vez han fumado de 1 a 5 cigarrillos diariamente, en la actualidad el consumo de ambas sustancias, ocasiona daños orgánicos, psicológicos, familiares y sociales. El porcentaje aumenta cada día por lo que es posible que en un futuro consuman más mujeres que hombres. Por otra parte, el estrés es consecuencia de desequilibrio entre las demandas de la situación (estresores internos o externos) al igual que los recursos de la persona, la dinámica en los servicios de salud se ve reflejada en 3 características principales: un gran esfuerzo mental y físico, continuas interrupciones y reorganización en los procedimientos y actividades desarrolladas por el personal de enfermería que agravan el nivel de carga y esfuerzo mental, también el trato con usuario del sistema de salud que se encuentra en circunstancias de aflicción y ansiedad (Lazarus y Folkman, 1986). La Dou (1994) señala que otras actividades de la vida laboral pueden contribuir al estrés, como son: la organización y relaciones organizaciones, el desarrollo profesional, las funciones de la organización, las tareas, el ambiente de trabajo y los turnos en el mismo. El desempeño de enfermería en su área de trabajo recibe como fuente potencial de estrés la intensidad del impacto de la enfermedad y los factores humanos y organizacionales, de tal forma que su trabajo conlleva a demanda de esfuerzo físico y una gran carga emocional (Chavéz, 1994). Según Zapata (1995) el trabajo es la segunda fuente generadora de estrés más importante después del hogar, debido a que en el área laboral el individuo frecuentemente se ve expuesto a procesos complejos que le demandan la aplicación de conocimientos y habilidades específicas o bien a situaciones que deberán responder a las exigencias del puesto que se desempeña. Enfermería es una profesión en la que se mantiene un alto nivel de estrés, la carga emocional del hogar, las presiones del trabajo físico, los cambios de ambiente, las circunstancias del usuario. Con frecuencia la enfermera funge como intermediaria entre los diferentes miembros que se desempeñan alrededor del usuario (Bejines, 2006), En este sentido, el personal de enfermería no está exento de consumir algún tipo de droga lícita como lo es el tabaco y alcohol como forma de liberar el estrés, ya que siendo promotor de la salud y de estilos de vida saludable, para centrarse en este contexto de cuidar la salud empezando por uno mismo. | es_ES |
dc.format | Adobe PDF | es_ES |
dc.language.iso | spa | es_ES |
dc.publisher | Universidad Autónoma de Querétaro | es_ES |
dc.relation.requires | No | es_ES |
dc.rights | Acceso Abierto | es_ES |
dc.subject | Drogas lícitas | es_ES |
dc.subject | Estrés | es_ES |
dc.subject | Enfermería | es_ES |
dc.title | Consumo de drogas lícitas y presencia de estrés en el personal de enfermería | es_ES |
dc.type | Tesis de licenciatura | es_ES |
dc.contributor.role | Director | es_ES |
dc.degree.name | Licenciatura en Enfermería | es_ES |
dc.degree.department | Facultad de Enfermería | es_ES |
dc.degree.level | Licenciatura | es_ES |