Descripción:
En el presente estudio se determinó la situación actual de la tuberculosis humana y bovina en el Estado de Querétaro a través de un análisis de información existente sobre los casos ocurridos en los últimos 5 años en las principales instituciones públicas de salud tanto animal como humana. Para realizar el análisis de la información en tuberculosis humana se obtuvieron los registros de los casos de tuberculosis generados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y Secretaría de Salubridad y Asistencia (SSA). La captura de la información se llevó a cabo en formatos previamente elaborados, en Jos que se incluyeron variables como: institución, unidad médica, número de caso, fecha de diagnóstico, origen, edad y sexo de los individuos afectados, entre otras. Después de la captura, los datos fueron exportados a través del programa EXPORT FILES del paquete SAS (Statistical Analisis System) para el análisis estadístico. La evaluación estadística consistió en una descripción de las variables consideras por medio de cuadros de frecuencia de variables categóricas y figuras que muestran la tendencia de la enfermedad desde 1992 a 1996. En cuanto al ganado bovino se refiere, se recolectó información sobre la situación del ganado productor de carne y leche en el Programa Nacional para la Erradicación de la Tuberculosis en el Estado de Querétaro, la cual fue proporcionada por la Subdelegación de Ganadería de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SAGAR). Dicha información se incluyó en cuadros, en los que se aprecia el inventario de animales probados a tuberculosis bovina y reactores a la prueba caudal. Los resultados del trabajo fueron los siguientes: se obtuvieron 799 casos de tuberculosis humana, en donde la mayor concentración de casos fue en el municipio de Querétaro. Con algunas excepciones, la frecuencia de tuberculosis fue igual para hombres que para mujeres. Las zonas como Jalpán y Pinal de Amoles son las que presentaron mayor tasa cruda de incidencia. El riesgo de desarrollar la enfermedad se incrementó con la edad, alcanzando su máximo en personas de más de 50 años de edad. El hacinamiento, antecedentes familiares de tuberculosis, Diabetes mellitus, SIDA, pobre higiene en el hogar y el tabaquismo fueron los factores de riesgo más importantes en el desarrollo de la afección. La forma más común de presentación fue la pulmonar. Las ocupaciones con mayor frecuencia fueron "estudiante" y "ama de casa". Por otro lado, se encontró que la prevalencia. de tuberculosis bovina en el Estado de Querétaro durante 1996 fue de . 79% para ganado de carne y 21. 78% para el ganado de leche. El único hato libre de tuberculosis se localiza en San Juan del Río y cuenta con 45 cabezas probadas de ganado de carne. Dentro de las conclusiones que se obtuvieron con este trabajo figuran: La incidencia, de casos de tuberculosis humana por año mantiene una línea ascendente. Con el seguimiento de un tratamiento apropiado, la tuberculosis es una enfermedad curable. En el Estado de Querétaro, el diagnóstico utilizado por las tres instituciones para la detección de tuberculosis humana es muy incierto, ya que por medio de la baciloscopía no se detecta otro tipo de tuberculosis que no sea la pulmonar. En lo referente a tuberculosis bovina, el mantenimiento de registros e información en general de la Coordinación Estatal de la Campaña de Control y Erradicación de la Tuberculosis en Querétaro es totalmente deficiente. Los programas de la Campaña no incluyen un diagnóstico eficiente a nivel de rastro y no han establecido la obligatoriedad de las pruebas de tuberculina a todos los hatos lecheros del estado. La prevalencia de tuberculosis en ganado de carne ha disminuido un 1.51 %, mientras que en ganado lechero el aumento de la prevalencia de la enfermedad ha sido casi del triple. El avance real de la Campaña contra la tuberculosis bovina es muy poco, esto debido a problemas políticos y económicos, los cuales impiden la indemnización a los propietarios de animales que fuesen destruidos por la enfermedad. También, es retrasado por problemas técnicos tanto a nivel de rastro como en el campo: tipo de muestreo, características de las pruebas utilizadas, estrategias implementadas, rastros sin capacitación del Médico Veterinario, sin inspección y sin notificación de casos sospechosos.