Descripción:
El suelo es un elemento fundamental para cualquier ecosistema, cumple funciones en el ciclo hidrológico, los ciclos biogeoquímicos y es el soporte de diversas actividades sociales. No obstante, se encuentra bajo una creciente presión y deterioro debido a los patrones insostenibles de producción y consumo. El presente trabajo tuvo por objetivo evaluar la erosión hídrica y el efecto de las prácticas de conservación de suelos en la subcuenca Presa Jalpan, ubicada entre los municipios de Pinal de Amoles y Jalpan de Serra, al norte del estado de Querétaro. El trabajo se desarrolló en cuatro etapas: 1) Análisis de las prácticas de conservación de suelos en la zona de estudio, donde se recopiló información a través de entrevistas semiestructuradas y se verificaron en campo los sitios intervenidos; 2) Determinación del efecto de las prácticas de conservación en la erodabilidad del suelo, para ello se tomaron muestras de suelo y mediciones in situ en parcelas pareadas de 9 sitios; 3) Estimación de la erosión hídrica e Identificación de zonas prioritarias para su manejo, aplicando el modelo USLE de Wischmeier y Smith (1978) y Sistemas de Información Geográfica, y 4) Estimación del aporte de sedimentos hacia la presa Jalpan, mediante la metodología de Avendaño et al. (1994). Como resultado se localizaron dentro de la subcuenca Presa Jalpan un total de 40 polígonos con prácticas de conservación de suelos distribuidos principalmente en la zona funcional alta. Se analizaron 22 sitios, con 7 tipos de prácticas: reforestaciones con pino-cedro, líneas de maguey, terrazas agrícolas, barreras de piedra acomodada, presas de piedra acomodada, presas de mampostería, cordones de ramas y combinaciones de las mismas. Las prácticas estructurales se encontraron deterioradas, más del 30 % de ellas requieren mantenimiento y el 20 % se encuentran colmatadas. Las prácticas vegetativas han tenido poco éxito, reflejado en la baja densidad y sobrevivencia de la planta. Respecto a las evaluaciones de erodabilidad, en 8 de los 9 sitios evaluados, la susceptibilidad a la erosión fue menor en las áreas con prácticas de conservación que en las áreas de control. Las barreras de piedra acomodada resultaron ser las prácticas más eficientes (99 %) mientras que las reforestaciones con pino-cedro alternadas con líneas de maguey fueron las de menor impacto en la conservación del suelo (5 %). La erosión actual calculada para la subcuenca fue de 463,313.303 ton/año, solamente se logra evitar una pérdida de 803. 141 ton de suelo al año con las prácticas de conservación. Las zonas con mayores tasas de erosión (áreas prioritarias) se localizaron principalmente en la zona funcional media. Aplicando el método de Avendaño et al. (1994), la subcuenca presa Jalpan tiene un aporte de sedimentos de 46,306.42 m3 anuales (degradación específica). Este volumen puede considerarse como el máximo que puede ser aportado a la presa Jalpan debido a que es el punto de salida de la subcuenca.