Descripción:
Las nanopartículas de magnetita han formado parte de la aplicación de nanomateriales en el área de la biomedicina, específicamente en el uso de tratamiento y detección de enfermedades, debido a que su propiedad ferromagnética facilita su manipulación in vivo con la aplicación de campos magnéticos externos. Sin embargo, uno de los principales problemas a los que se enfrentan es el tiempo medio de circulación de dichas partículas en el organismo, por lo cual se busca aumentar la biocompatibilidad de dichas partículas con el uso de recubrimientos que aumenten el tiempo medio del material dentro del organismo y a su vez disminuyan los efectos adversos en los tejidos. Para evaluar la respuesta toxicológica de la magnetita y compararla con la obtenida con el mismo material pero modificado con un recubrimiento de óxido de silicio se realizó un ensayo celular in vitro en la línea HT29. Las partículas de magnetita se obtuvieron mediante el método de co-precipitación química asistido con baño ultrasónico y se modificaron mediante el método de Stöber para conseguir el recubrimiento de óxido de silicio. Como resultado se arrojaron que las dosis de 80 ppm y 160 ppm de magnetita presentaron la mayor muerte celular dentro de la curva de dosis respuesta y que el material modificado con silicio en las dosis de 20 ppm y 160 ppm fueron las que generaron el mayor daño. A pesar de que ambos materiales en la dosis de 160 ppm tienen la menor viabilidad, el material modificado fue el que obtuvo mayor biocompatibilidad con las células durante toda la curva de dosis respuesta, lo cual se le atribuye al recubrimiento que redujo las zonas de los átomos de hierro que pudieran llegar a generar estrés a los cultivos o lixiviación de especies reactivas de hierro que generan una alteración en el crecimiento celular.