El poco o nulo conocimiento y/o interés por parte de la gran mayoría de la población sobre el sistema de pensiones, en general, y sobre el funcionamiento de las Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORES), en particular; así como las bajas tasas de reemplazo pronosticadas, las cuales, a su vez, son producto de bajas densidades de cotización y de salarios insuficientes (por mencionar sólo algunos factores determinantes) son algunos de los problemas que envuelve el ahorro para el retiro y que deben ser estudiados y trabajados en aras de identificar cambios viables que nos permitan llegar a la consecución de nuestras metas financieras.