Descripción:
La toponimia como palabra enunciada encierra una gran cantidad de conocimientos de toda índole, ya sea de tipo científico, empírico, intuitivo o filosófico. En este trabajo se demuestra una parte de esos conocimientos, gracias a la toponimia podemos conocer lo que pensaban nuestros abuelos, su relación con la tierra, su cosmovisión del mundo; también podemos observar que la lengua tiene sus propios procedimientos para enriquecer el léxico, generando nuevas palabras sin necesidad de recurrir a tantos préstamos del español como lo hacemos las nuevas generaciones de la actualidad, que a veces esos préstamos no son indispensables. Este ejercicio también aporta un poco a la documentación lingüística ante el desplazamiento de esta variante dialectal por el español.